Es América Latina, la región de las venas abiertas. Desde el descubrimiento hasta nuestros días, todo se ha trasmutado siempre en capital europeo o, más tarde, norteamericano, y como tal se ha acumulado y se acumula en los lejanos centros de poder. Todo: la tierra, sus frutos y sus profundidades ricas en minerales, los hombres y su capacidad de trabajo y de consumo, los recursos naturales y los recursos humanos. El modo de producción y la estructura de clases de cada lugar han sido sucesivamente determinados, desde fuera, por su incorporación al engranaje universal del capitalismo. -Eduardo Galeano-
La región de las venas abiertas. La región que llora a sus líderes populares que enfrentados con las corporaciones dejaron su vida. Y se cuentan de decenas: Néstor, Chávez, el Che, Evita, Perón. Personas que fueron denostadas por los sectores de poder económico concentrado y lloradas por el pueblo, el trabajador, a quien una simple solución le cambiaba definitivamente la vida.
Y ahora Chávez.
Le dijeron dictador, pero no recuerdo ya cuántas elecciones democráticas ganó ampliamente. Le dijeron autoritario, pero una persona que tenga esas características no podría ser puntal de paz en la región. Lo tildaron de brabucón, pero su bella diálectica endulzó los oídos de millones de personas a lo largo del mundo.
Y ahora América latina lo llora.
Es que jamás podrá entender aquel que no comprende a los populismos como movimientos de transformación social, lo que los líderes logran en el sentimiento del pueblo. Y hablo de sentimiento porque como con Néstor, la devoción a su máximo referente trasciende todo tipo de fronteras. Decimos amor. Decimos lo extrañaremos. Decimos ¿por qué?. Al igual que cuando un ser querido se nos va....
"Ha muerto un justo, ha muerto un valiente, uno de los más grandes entre nosotros, llorarlo sería poco [...] La mejor manera de honrarlo es haciendo una patria nueva". Hugo Chávez cuando murió Néstor Kirchner.
Hay quienes dicen que una sonrisa es el mejor remedio a un mal día. Quedan grabadas en las retinas de millones de latinoamericanos, esa sonrisa caribeña que el Comandante sabía desplegar en cada jornada de trabajo. Y no es menor. Sonreír dignifica a las personas.
¿Quién fue Chávez? La mejor respuesta la leemos de La Cámpora: "Fue el primero de una serie de líderes latinoamericanos que vendrían a romper con la monotonía de la canción neoliberal que sonaba entre nuestras naciones y por eso luchó durante años, aislado en ese concierto, desafinando con la voz de lo nacional y lo popular".
Adiós mi comandante. Tu legado seguirá vivo en el pueblo. Tus ideas no partirán.
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